Chill Out Crimes II

Pertenezco a una generación maldita, eternamente condenada a escuchar a Timbiriche de las más diversas formas. Uno esperaría que cuando dejara la adolescencia, el mundo sería diferente, pero no. Estaba en secundaria y Timbiriche estaba en su apogeo. Salí de prepa y se seguía oyendo a Timbiriche. Me iba al antro en la universidad y el pelmazo DJ seguía poniendo a Timbiriche. Tengo ya 33 años, soy padre de un bebé y ¡¡¡el mundo me sigue poniendo a Timbiriche!!!

En su momento, Timbiriche me era indiferente. No me gustaba, tampoco me disgustaba como ahora lo hacen, por ejemplo, Shakira, Maná, la nueva Julieta Venegas, Arjona o La Oreja de Van Gogh. Pero ese afán planetario de no reconocer que la hora de Timbiriche ya pasó me exaspera.

El último atentado al pudor y el buen gusto se llama “Timbiriche Chill Out” y es feo como darle besos de lengua a un vaca. Hoy escuchaba a Luis de Llano hablando orgullosamente de ese disco en un programa de radio (aclaro, accidentalmente, porque, como sabrán, yo ya no oigo radio). La pura idea me envenenó el aire que respiraba.

Sólo para que no me digan que echo pedradas sin saber, visite la página de Mixup para escuchar los “sniplets” del disco (esos pedacitos de 30 segundos que sirven para que te des una idea de la canción).

En resumen, es una mamarrachada (y un intento más de Luis de Llano de meter la mano a la cartera de los fans del grupo). Supuestamente la producción es para “evolucionar a Timbiriche con el sonido de hoy”, pero las mezclas gritan 1992. Se oyen sumamente anticuadas y además están hechas muy a la mexicana, sin nada de elegancia y queriendo hacer un pozole de influencias: cantos gregorianos, sonoridades asiáticas, dizque flamenco y dizque bossa nova.

Lo peor es el sintetizador que suena a mariachi en “Besos de ceniza” (¿recuerdan en la película “El Mariachi” original que un cantinero no le quiso dar chamba al protagonista porque ya tenía música en vivo y le pone a un monito tocando un organito Casio? Así suena)

Es imposible volver chill out a canciones como “La banda Timbiriche” u “Hoy tengo que decirte papá”. ¿A quien se le ocurrio? Se ve como esas quinceañeras obesas metidas con calzador a un vestido de shatung de seda. Es pretender darle a unas canciones simples y cursis algo que nunca tuvieron ni quisieron tener.

Timbiriche Chill Out es, en resumen, un muy mal viaje.

Chill Out crimes

Muchos crímenes se comenten en nombre del Chill Out. Este es el más reciente: "Timbiriche Chill Out + Dance".

De ser antaño una clasificación confiable para cierta variedad de música electrónica de tempo lento, "Chill Out" es ahora un sticker que la industria musical le anda pegando a cualquier cosa, incluyendo los viejos discos de New Age de los ochentas (¡de verdad!) o a cualquier canción con un fondo atmosférico de sintetizador.

No sorprende que los músicos serios de chill out mejor estén definiendo sus creaciones como down-tempo o ambient. ¿Timbiriche Chill Out? ¡Por favor! ¿Qué creen que uno no conoce a Kruder & Dorfmeister?

¡¡Le atinamos!!

Con toda la vanagloria y alardeo del mundo, pero le atinamos: aquí en De Plano fuimos los primeros en perfilar a Juan Alcocer Flores como director del Instituto Estatal de la Cultura y este domingo, durante la presentación del gabinete de Juan Manuel Oliva, nuestro pronóstico se hizo bueno.

Alcocer Flores, ex alcalde de Salamanca y el principal animador para la restauración del Ex Convento de San Agustín convertido en Centro de las Artes de Guanajuato, fue quien coordinó la propuesta de cultura para el Libro Blanco de Oliva como candidato, por lo que ¿quién más iba a dirigir la cultura en Guanuajuato que quien diseñó la política respectiva para el sexenio que inicia?

Me tocó entrevistarlo antes de inaugurar el Centro de las Artes y más recientemente lo acompañé a una visita a Peralta con gente cercana a la Fundación Cultural Guanajuato. Es una persona sencilla, de charla muy agradable e ideas muy claras. A mi me tenía asombradísimo que, siendo diputado (gremio que no goza de todas mis simpatías), en la sobremesa hiciera la recomendación de un libro de Umberto Eco para perderle miedo a la pintura abstracta.

Va a ser muy interesante. El señor Alcocer se ha metido mucho con iniciativas como la recuperación de la zona arqueológica de Peralta, por lo que es indudable que tiene entusiasmo, tiene colmillo legislativo y además sensibilidad estética (pinta y escribe), así se puede avisorar que hará cosas dignas de verse. Sólo falta que se rodee de la gente correcta.

Hagan sus apuestas

La próxima semana será el cambio de gestión en el Gobierno del Estado, por lo que la expectación por saber quién queda en el área de cultura quedará satisfecha.

A nivel local, apenas va a empezar a ponerse emocionante, pues el Ayuntamiento se renovará en los primeros días de octubre y el Instituto Cultural de León, como es un organismo descentralizado, es probable que termine el año como está, antes de que se renueve su consejo ciudadano y entonces sí, puedan verse nuevas caras.

Juan Antonio García Ramírez, debido a que lleva dos períodos al frente del consejo directivo, es casi seguro que deje su silla de presidente, aunque no será difícil seguirlo viendo como un consejero más.

Sobre el sucesor de García Ramírez, las dispersas especulaciones apuntan a que ya lo conocemos. Es decir, es más que probable que sea un miembro del actual consejo de la institución. ¿Será un artista como Ricardo Motilla o Sylvia Salomón? ¿Un empresario como Gerardo Pons o Roberto Torres Medina?

A Luis Rodríguez Tirado y Gerardo Alderete, bórrelos de la lista, puesto que aunque son consejeros del ICL, ya bastante chamba tienen con la Fundación Cultural Guanajuato y el Proyecto Poliforum. Federico Zermeño ya supo lo que era ser presidente y las damas Yolanda Solís y Patricia Kravetz han mostrado un perfil discreto como para andar en esos menesteres.

¿Quién nos queda? ¿Ese hombre a quien nuestro amigo Sergio Pablo Tejada llama “Mister Cultura”? Sí, David Ramírez Chávez.

No estaría mal. Además de cirujano plástico, Ramírez Chávez ha sido uno de los consejeros más activos y enterados del ICL, recuérdese solamente su participación organizando, junto con Mario Méndez, los proyectos “La toma del Barrio” y “Trabajo en huelga”, que convirtieron en efímeras salas de arte a un vieja tenería del Barrio Arriba y al tianguis El Baratillo.

Quedando Ramírez Chávez en la presidencia del ICL, no habría que descartar que Juan Meliá se conservara como director del organismo, puesto que ambos mantienen, además de amistad, afinidades estéticas y modos de entender la cultura.

Independientemente de ello, sería muy interesante ver al ICL con un ciclo completo de Juan Meliá. Hay que recordar que el hombre aún no cumple un año en el puesto, tiempo suficiente para lograr tender relaciones más positivas con los creadores locales y darle más coherencia a los programas institucionales.

Como sea que quede la formación del ICL, será un trienio de redefiniciones, puesto que en el curso de los tres próximos años quedará concluido el Centro Cultural Guanajuato y el organismo municipal deberá explicitar una vocación clara para que la gente no perciba que CCG e ICL son competencia o se traslapan funciones.

¿Verdad que se pone emocionante?

Queremos noJazz
La semana pasada nos congratulábamos por la inclusión del grupo noJazz en la programación del Cervantino, en sustitución de Baba Maal. Hoy, debemos sentirnos doblemente contentos porque nos ha hecho justicia la revolución, ya que además de su concierto en la Alhóndiga de Granaditas el 11 de octubre, la agrupación francesa actuará en León al día siguiente, en el Centro Cultural Guanajuato ¡Y gratis!

Con apenas un mes de servicio, el CCG ya será sede de dos espectáculos cervantinos (también recibe a Sarruga) y eso que todavía no está listo el teatro. Cuando el complejo cultural esté completo tenga por seguro que la fiesta del FIC se multiplicará por 10 en la ciudad.

Mercado de artes
Hablando del CCG, ayer se presentó a medios y artistas el proyecto para el primer Mercado de las Artes “Jorge Ibargüengoitia”, que se realizará en marzo del próximo año. Un mercado de las artes es como un ANPIC o un SAPICA, pero de artistas y promotores culturales.

Aunque a nivel mundial y nacional este tipo de proyectos llevan tiempo haciéndose, son completamente inéditos en la región y no sólo ello, sino también sumamente necesarios. Precisamente el enlace entre grupos artísticos e instituciones culturales es lo que a veces no cuaja, para perjuicio del trabajo de ambos. Ojalá que esta valiosa iniciativa del CCG logre el éxito que se merece.

Publicado en AM León el 23 de septiembre de 2006.

Ensalada, no de pollo

Cuando Didi Pei presentó el diseño revisado para la Biblioteca Central Estatal hace un par de años, algunos nos sentimos un poquito decepcionados al ver el cambio respecto al primer render presentado en 2003.

Cuando pisamos ese lugar la semana pasada, nos dimos cuenta de que nuestra preocupación había sido infundada y el edificio era precioso, elegante, digno, moderno y accesible a la vez. Primera expectativa superada.

El Centro Cultural Guanajuato esperaba 5 mil personas para su jornada inaugural y recibió 16 mil, segunda expectativa superada.

A sólo una semana de haberse puesto en marcha esta ambiciosa obra, es notorio el cambio que está empujando el CCG. Basta revisar las noticias publicadas en este lapso para darse cuenta de la aceptación que va logrando el complejo en la población, y eso que todavía no está completo.

Dato ilustrativo y pareciera que chistoso. La mayoría de los conocidos de este servidor no suelen hablar de actividades culturales. Ahora con el CCG, todos estuvieron preguntando sobre fechas, horarios y recomendaciones. Parece que más de algún renegado que llevaba años sin pararse a un evento cultural se fue a ver a Strange Fruit. Tercera expectativa superada… y las que faltan.

La buena y la mala
Noticias sobre la programación del 34º Festival Internacional Cervantino. La mala, el cantante senegalés Baaba Mal, una de las fuguras africanas del World Music, ha cancelado su actuación del próximo 11 de octubre, en la Alhóndiga de Granaditas.

La buena, es que en su lugar, el equipo de Mini Caire ha tenido el tino de programar a los geniales deschavetados franceses de noJazz, el iconoclasta grupo jazzístico que hace dos años sembró la locura y enfiestó hasta a las momias.

Los galos comandados por el trompetista Guillaume Poncelet demostraron que se podía poner la Alhóndiga a 100 grados centígrados sin necesidad de ser rockero y fueron, en automático, uno de los grupos que uno deseaba ver nuevamente en el Cervantino.

Aunque Baaba Mal es un figurón, este es uno de esos casos en que el bateador emergente parece compensar y de sobra al titular. Gracias FIC, preparémonos a corear junto a noJazz: “¡Eh, ah, el bogalooo!”

Ahora falta saber quién llega en lugar del grupo británico Belle & Sebastian, una de las bajas más notorias para el público juvenil del Cervantino.

Malabar
A medida semana, el equipo comandado por Carlos Pascual, Mayne Rosas y Jorge Rueda presentó la revista cultural “Malabar”, nuevo ejemplo de que hay gente que no se cree eso de que el Bajío es tierra árida para ese tipo de cosas.

El primer número es gratamente sorprendente. Es como la resurrección de la extinta Viceversa, con poemas de Fabio Morabito, un texto de Juan Villoro (Como lo vio en Alemania 2006) que reflexiona sobre el valor narrativo de los taxistas y peluqueros y elocuentes fotografías de Waclaw Wantuch y Evgen Bavcar, un artista esloveno ciego.

Buena suerte. Ojalá los patrocinadores estén a la altura del reto, porque vaya que es frustrante hallarse con quien dice “Las revistas culturales no son nuestro mercado” como si quien lee a Villoro no usara zapatos o bebiera refrescos.

Ojo también esas instituciones que salen con su ejemplar muestra de visión diciendo: “Ah, no, nosotros no nos anunciamos en revistas ajenas porque ya tenemos la nuestra de 200 ejemplares”. En estos menesteres de la mercadotecnia pegada con lo cultural, aún nos falta un trecho por recorrer.

Aviso clasificado
Mario Méndez, el creativo artista plástico leonés, anda buscando portadas de revista donde aparezca la controvertida modelo Kate Moss como parte del proceso de creación de una de sus nuevas piezas. A cambio de las portadas y previendo que para muchos puede ser muy valiosa su colección de Cosmopolitan, Méndez anda ofreciendo un dibujo de su autoría como trueque. Curiosos abstenerse.

Obituario
Extendemos nuestro pésame a la familia del jovial promotor cultural y artista plástico leonés Lamberto Popoca, por el fallecimiento de su señor padre, Lamberto Popoca Cabildo, acaecido la semana pasada.

Publicado en AM León, el 16 de septiembre de 2006.

A cada capillita

Ahora sí que como dijo Ray Charles en medio de un concurso de belleza. No hay ni para dónde ver.

El jueves fue una más que magnífica jornada para la cultura en la entidad, pues no sólo se puso en funcionamiento la primera fase del Centro Cultural Guanajuato, sino que el presidente Vicente Fox anunció la descentralización del Festival Internacional Cervantino y el gobernador Juan Carlos Romero la licitación para el ambicioso teatro que coronará al CCG.

Cada una de esas noticias tiene un gran peso. Darlas todas juntas es prácticamente un buffett. No cabe duda que en cultura, también "a cada capillita le llega su fiestecita".

Por cierto. ¿Ya fue al Centro Cultural Guanajuato? No, nada de que a usted no lo invitaron o no lo dejó pasar el Estado Mayor. Eso fue el jueves, ahora nos toca a todos los leoneses que no trabajamos de presidente hacer nuestra la más importante obra de infraestructura cultural jamás levantada por estos lares.

Los que tienen arraigada la idea de que a las bibliotecas sólo van los niños que deben hacer tarea, pero no tienen Internet, puede sorprenderles que la Biblioteca siga la corriente contemporánea de que estos recintos sean lugares de encuentro social, marcas cívicas de una comunidad que hace uso de ellas dentro de sus esquemas de ocio y recreación. Ojalá que esa cultura también cobre arraigo en León.

Detalle por demás remarcable es que la Biblioteca Central lleve como denominación "Wigberto Jiménez Moreno". Es el mejor modo de inscribir en la memoria colectiva el nombre de un destacado intelectual leonés no bien reconocido por el público popular.

Jiménez Moreno (1909-1985) fue un destacado antropólogo y etnólogo que llegó a dirigir el Museo Nacional de Historia y el Departamento de Investigaciones Históricas de la UNAM. Fue autor de innumerables libros que todavía hoy son referencia para estudiosos de su campo.

Por si alguien la extrañaba, la Biblioteca "Wigberto Jiménez Moreno", que hasta hace unos meses estuvo en la Ex Cárcel Municipal, ahora ocupa la tercera planta de la Biblioteca Central Estatal y conforma su fondo reservado.

El anuncio de licitación para la primera etapa del teatro fue también un motivo de fanfarrias, debido a que, al ser el elemento más complejo y costoso del CCG, era el más vulnerable en caso de posibles recortes presupuestales.

Afortunadamente, el gobierno federal ya se anotó con la mitad de los 400 millones de pesos que costará, lo que equivale a un pase a gol para el gobierno estatal, que, con nueva administración a partir de unos días, sólo le falta completar la faena.

Habrá que esperar hasta el 2008 a que esté terminado el teatro, pero por lo pronto ya los guanajuatenses podemos decir que, cuando menos con el CCG, recibimos la "enchilada completa".

Los que suenan
Luis Fernando Brehm, Eugenia Tenorio y el diputado pintor, escritor y rescatista de patrimonios arquitectónicos Juan Alcocer, son los nombres que andan sonando para ocupar el Instituto Estatal de Cultura cuando comience la gestión de Juan Manuel Oliva.

Lo único que tienen en común todos ellos es que representan un estilo completamente diferente al del actual responsable del IEC, Jorge Labarthe, lo cual equivale a decir que es casi un hecho la salida de éste del organismo cultural estatal.

Hagan sus apuestas, que la cosa no es sencilla. Brehm es el más experimentado de todos, pero hay quien no le perdona su concepto de "Cervantes en todas partes", donde no siempre correspondía el nivel del espectáculo con el del público.

Tenorio es prácticamente una polluela en el sector, pues no tiene ni siquiera un lustro al frente del área de Extensión de la Universidad, pero hay quien le puede dar un espaldarazo definitorio y hay quien no le perdona que haya coincidido su gestión con la salida de personajes que hicieron un gran trabajo en la UG, como Juan Meliá, José Luis Castillo y Teresa Elizarrarás.

Alcocer por su parte, es un ente curioso. Demasiado político para el mundillo cultural y demasiado culto para el mundillo político. Quizá pueda hacer la jugada maestra que unifique para bien ambas esferas.

Publicado en A.M. León el 9 de septiembre de 2006.

Retro is beautiful

Nada más tengo tiempo de hacer un post, pero quería hablar del veredicto del Tribunal Electoral y de una curiosidad de Internet cortesía de los creadores del Church Sign Generator: el Cassette Generator, que produce imágenes como esta. Opte por usar el segundo para mostrar mi parecer sobre el primero.

Por cierto, que tengo un titipuchal de música en cassette que no me decido a pasar a CD. Tardaría años en eso, pero ni modo que mis cassettes de New Age (No me juzguen tan feo, era parte de mis búsquedas de adolescente, jaja) se pierdan para siempre.

Rayas y centellas

Ya han de saber que ayer murió Steve Irwin, ese australiano zafado que conducía el programa "Cazador de cocodrilos", en Animal Planet.

A mi me causó gran impresión tanto que se hubiera muerto alguien que tenía un hijo de 2 años, como el hecho de que la acusada de haber acabado con Irwin hubiera sido una mantarraya. Yo tenía la idea de que las mantarrayas eran unas buenas bestias marinas incapaces de dañar a un ser humano. Vamos, no tienen dientes siquiera, pieles venenosas ni algún otro instrumento defensivo o de ataque.

Pero como hay dos cosas que no cuestan nada en la vida, soñar y consultar la Wikipedia, encontré que lo que mató al Cazador de Cocodrilos fue una Raya, no una Mantarraya. Las rayas, especialmente las australianas, sí tienen un aguijón venenoso en la cola. No es tanto la toxicidad del veneno lo peligroso, sino que el juguetito mide 30 centímetros y es tan afilado como un bisturí.

Descanse en paz Irwin, aunque supongo que era la forma de morir más ad hoc para alguien como él.

Cuadros de una exposición

La carretera que lleva a Guanajuato era en ciertos momentos invisible durante la tormenta que cayó la noche de este jueves. Superar la atmósfera fantasmal que creaban las nubes de rocío dejadas tras de sí por los camiones, la lluvia y los relámpagos, tuvo su recompensa en el antiguo Colegio de la Santísima Trinidad.

Más popularmente conocida por “Relaciones Industriales” (aunque la facultad respectiva ya no está ahí, sino en el campus Marfil), esta parte de la sede central de la Universidad de Guanajuato se puso de manteles largos con la inauguración de la exposición “1900. Impresionismo y Vanguardias”.

Ya los detalles generales del evento han quedado consignados en la nota respectiva, lo que quisiera en este espacio es la admiración por la muy nutrida afluencia que tuvo la noche de apertura. Aunque ciertamente la gran mayoría eran estudiantes de la UG a los que la galería les quedaba a tiro de piedra (y más con vino y canapé gratis), no deja de ser estimulante ver que sean Renoir y Cézanne y no Alex Lora quienes provoquen tumultos.

Aunque es relativamente breve (40 piezas), la curaduría pudiera parecer forzada a los quisquillosos (¿Claudel y Dalí en la misma expo?) y sus grandes estrellas o están presentes con una sola pieza o bien, con obras fuera de sus períodos de esplendor (un Van Gogh principiante o un Renoir que ya se amarraba el pincel a las manos para pintar a pesar de la artritis), la exposición es definitivamente un espectáculo.

En lo personal, si sólo tuviera los paisajes de Maurice de Vlamick y esa melancólica acuarela de Vincent van Gogh, la visita ya hubiera valido la pena. ¿Cómo permanecer imperturbable ante ese campo de trigo oscurecido pintado por un hombre que se ha convertido en símbolo universal del artista atormentado?

La mano con que Van Gogh pintó “Paisaje en Drenthe” fue la que usó también para arrancarse una oreja, escribirle innumerables cartas contando sus penas a su hermano Theo, acariciar tal vez a la única mujer que lo amó, recibir los pingues 400 francos de su único cuadro vendido y meterse una bala en el pecho un mal día del verano de 1890.

Por eso, estar ahí, en una de las salas de arte de la Universidad de Guanajuato, ante un Van Gogh es sentir que de plano “120 años de historia nos contemplan”.

A los mexicanos, que nos queda tan lejos visitar una muestra con medio centenar de Cézannes, Picassos, Matisses, Renoirs o Van Goghs, esta pequeña probadita es por demás placentera. Con todo, no crea que verá “highlights” a cada paso, ni espera encontrarse con “Los girasoles”.

Quizá tan notables como la exposición, sino es que más porque ésta si va a durar después del 10 de diciembre, es la magna retocadita que la Universidad de Guanajuato le dio al patio de su antigua Facultad de Relaciones Industriales para convertirlo en un recinto cultural de gran apostura y belleza.

Da gusto ver que el ejemplo de rescate del patrimonio arquitectónico de nuestra ciudad capital se extiende cada vez más.

Si se lamenta de no haber podido ir a la inauguración de “1900. Impresionismo y Vanguardias”, que le sirva de consuelo que quizá le sea más fácil visitarla a partir del segundo día y que podrá, al contrario de muchos de los que fueron a la premiere, ver las obras de Jean Dufy que fueron retiradas de sus clavos por una grosera e inoportuna gotera.

La muestra dura hasta el 10 de diciembre, así que tiene bastante espacio en la agenda para hacerle lugar a una visita y un pretexto extra para visitar Guanajuato.

Centro Cultural a la vista
En 10 días se cumplirán cinco años de la primera reunión convocada por la Fundación Cultural Guanajuato con distintas personalidades para perfilar el proyecto del Centro Cultural Guanajuato.

Un lustro ha pasado desde esa reunión que parecía estar girando en torno a una bella fantasía y ya estamos aquí, a la víspera de la inauguración de la primera fase de este proyecto que significa un parteaguas para la ciudad y el estado.

Cuando a partir del jueves pueda estar frente a la contemporánea elegancia arquitectónica de la Biblioteca Central, indudablemente podrá decir: “Sí, esto es lo que nos merecíamos”.

Publicado en AM León el 2 de septiembre de 2006.