enero 12, 2009

Cosas mal hechas

Por estos días, hay una votación en Internet convocada por la Secretaría de Turismo del Distrito Federal para elegir la nueva marca turística de la Ciudad de México.

Es un concurso rodeado de mucha polémica, debido a lo alto del primer premio (¡un millón de pesos por un logotipo!) y a lo horripilante que fue la primera selección de finalistas, en la que de plano no había ni a cuál irle (la primera imagen es de uno de los finalistas anteriores, aunque usted no lo crea).

El gremio de los diseñadores gráficos protestó con toda justificación en foros y blogs y además, se abrió un grupo en Flickr para mostrar todos los trabajos participantes y evidenciar que había entre los rechazados, logotipos infinitamente superiores a los finalistas.

Pues parece que la movilización surtió algo de efecto, porque los organizadores han descalificado tres de los anteriores finalistas, por utilizar imágenes de stock protegidas por derechos de autor, y los reemplazaron por logos algo más presentables. En Flickr definitivamente hay logos muy buenos, pero si hay que votar por alguno de los cinco finalistas, mi favorito es el número 5.

Ojalá que este concurso sirva de lección para dependencias y funcionarios que no siempre toman con toda la seriedad debida la comunicación gráfica.

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