Ayer miércoles, comenzó la edición 35 del Festival Internacional Cervantino. ¿Dónde estaba yo a las 20:00 horas, en que comenzó el espectáculo inaugural en la Alhóndiga de Granaditas? En mi casa, preparando fajitas de pollo para la cena.
Es la primera vez en mis casi ocho años de periodista que no estoy presente en el inicio del Cervantino. El año pasado no me tocaba cubrir nada el primer día, pero de todos modos, fui a ver un poco de "Carmen" en la Alhóndiga y al concierto de los BBC Singers en el Teatro Juárez. Pero esta vez, nada. Me quedé a 50 kilómetros de la fiesta.
Con alrededor de una decena de reporteros de AM asignados para cubrir las actividades del Cervantino, es obvio que no todos ven acción al mismo tiempo. En mi caso, me tocará hasta hoy jueves testimoniar la inauguración en León y hasta el viernes ir a Guanajuato, a echarle ojo al "Otelo" de Meno Fortas (uno de mis "must" personales) y ooooootra vez a los Entremeses Cervantinos (será la cuarta vez).
Entiendo ahora a esos jugadores guarros de futbol que se la pasan quejándose de que no son titulares y que el entrenador los tiene en la banca. Cuando uno se acostumbra a estar en la cancha, resulta difícil dejarla y convertirse en espectador. Leer una nota ajena y sentir que uno lo pudo hacer mejor o aprovechar algún detalle perdido. Sí, ahora entiendo a Oliver Khan, quedándose sentado en su propio estadio para la apertura del Mundial de Alemania 2006.
Pero hoy me toca y además esto apenas empieza.
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1 comentario:
Pero cómo te quejas!!!
jajaja, lo bueno esque tus jefecillos se dieron cuenta ke los otros vatos no la rifan en la redactada cultural y vovieron de su loca ensoñación donde mal concebían que otros podían con el paquete y te devolvieron la batuta del cervas. Bien por tí!
You´re the Best!
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